Mi caldera pierde presión

Problemas en mi Caldera (III):
Mi caldera pierde presión

En días de frío una de las mejores sensaciones que podemos tener es la de contar con un buen calor de hogar, pero al igual que sucede con cualquier mecanismo, desafortunadamente nuestra caldera no está exenta de sufrir averías. Una de las más comunes es la de pérdida de presión. La presión de la caldera la controla una bomba y un manómetro que es el encargado de indicar la presión en cada momento. Generalmente cuando la caldera no está funcionando, podemos ver una presión de 1,2 – 1,5 bar. Es importante tener estos datos en cuenta para saber si realmente se ha producido una pérdida de presión.

Causas probables de la pérdida de presión

Mi caldera pierde presión - Fuga en la llave de vaciado del sistema

Fuga en la llave de vaciado del sistema

Es la llave que se utiliza para vaciar el agua del sistema y proceder a sustituir alguna pieza cuando hemos sufrido una avería. Se utiliza poco pero suele ser motivo de problemas porque se deja lígeramente floja provocando así una fuga de agua. No es fácil detectar este tipo de fugas ya que no hay aparente síntoma más que la pérdida de presión.
Nuestra recomendación: Presta atención a si tienes que reponer agua en la caldera con cierta frecuencia porque posiblemente se deba a una fuga por esta llave de vaciado

Mi caldera pierde presión - Fuga en el sistema interno de calefacción

Fuga en el sistema interno de calefacción

Hablamos de una de las peores fugas que podemos sufrir. Es dífícil de detectar y también de resolver. Desgraciadamente el agua puede incluso llegar a crear filtraciones en la vivienda.
Nuestra recomendación: La manera más sencilla de detectar es mediante revisión del consumo de agua. Si ésta aumenta y existe una pérdida de presión en la caldera, podemos estar teniendo una de estas fugas.

¿Cómo puedo subir la presión de mi caldera?

Si tienes baja presión puedes seguir utilizando la caldera un tiempo con una sencilla operación: abrir la válvula de llenado de la caldera, recuperar la presión y cerrarla. Si el problema persiste, ya si es recomendable que contactes con un profesional.
Nuestra recomendación: Realizar una revisión poco antes de la llegada del invierno para atajar cualquier problema que pueda haber en la caldera y estar preparados para los meses de frío.